Despidos y conflicto
Tras casi nueve años a al frente de los talleres III y IV de televisión, de la licenciatura en Comunicación Social, los profesores Mariela Bernárdez y Juan Mascaró fueron apartados de sus cátedras, en lo que constituye unos despidos injustificados y discriminatorio por el posicionamiento político de los docentes. A partir de los despidos, estudiantes independientes, docentes y agrupaciones políticas, comenzamos a trabajar en unidad realizando proyecciones, radio abierta y asambleas, con el objetivo de lograr la reincorporación y por la democracia en la UNLaM.Así se logró la “renuncia” del coordinador de la carrera, Aníbal Binasco, y una amplia participación que instaló el debate sobre la universidad que tenemos y la que queremos.Las autoridades de la universidad, el rector Daniel Martínez con la complicidad de la Liga Federal (JUP), respondieron con amenazas, llamados telefónicos, y hasta pintaron las paredes de la universidad acusándonos al MST-FACU buscando desviar el foco del conflicto. Esto no solo no nos perjudica, sino que nos da más fuerzas para seguir luchando en unidad hacia la democratización de la UNLaM. Hablamos al respecto con la profesora Mariela Bernárdez:
¿En qué se basa el reclamo de docentes y estudiantes?
Pelear nuestra reincorporación tiene como fondo el planteo de temas más profundos ¿Qué universidad tenemos y qué universidad deseamos? Excede mucho más que discutir una universidad pulcra y limpia, que bienvenida sea. Queremos que los estudiantes participen en las decisiones y que ellos elijan lo mejor para ellos. No que las autoridades decidan todos los caminos y cambios sin ninguna consulta.Nuestro trabajo en la cátedra al parecer molestaba a las autoridades de la universidad y a su línea de pensamientos e intereses. No se educa a estudiantes para que tengan un accionar crítico sino para que solo sean técnicos, soldaditos del sistema.
¿Cuál fue la reacción de las autoridades durante las actividades que llevaron a cabo ustedes y las agrupaciones?
Si vos te manifestás o protestás, en algunos casos solo te contestan que es una decisión tomada, que queda en disposición del rectorado revertir la situación o no. Eso desalienta a muchos docentes y no siguen reclamando.
¿Y a los que siguen, como es el caso de ustedes?Es como un manual. Primero manipulan el consenso, hacen creer que es un reclamo de una minoría revoltosa, lo que hace que la mayoría se sienta ajeno. Por ejemplo, como pasó con las pintadas, todo basado en mentiras.
En segundo lugar, cuando lo primero no funciona, empiezan las llamadas telefónicas raras que te dicen tu nombre y apellido y luego se quedan en silencio. Amenazas, nunca cara a cara, porque quedarían expuestos. Así funciona con nosotros y así funcionó con otros docentes que incluso recibieron amenazas de muerte.
En segundo lugar, cuando lo primero no funciona, empiezan las llamadas telefónicas raras que te dicen tu nombre y apellido y luego se quedan en silencio. Amenazas, nunca cara a cara, porque quedarían expuestos. Así funciona con nosotros y así funcionó con otros docentes que incluso recibieron amenazas de muerte.
Desde la JS de La Matanza invitamos a llevar la más amplia solidaridad a los compañeros docentes escribiendo a: documentatrabajo@gmail.com, y reafirmemos nuestro compromiso en la lucha por las reincorporaciones y la democratización de la UNLaM.
JS-MST Facu
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